Algo que te interese

De habitantes y de amores potenciales.

Yo sé que no te visito tanto, querido. Pero, como un amante cualquiera, a veces vengo a buscarte, porque te necesito. Porque necesito de tus oídos virtuales. Porque quiero escribir e imaginar como mis sentimientos se hacen millones de pixeles.
Sé que, te abandono, te busco, te abandono otra vez. Pero acá me ves, volviendo. Después de haber pasado por el anonimato de un diario íntimo, y la fidelidad del papel. Furtivamente, en la madrugada de un sábado (¿o es acaso la del domingo?) te vuelvo a buscar. Golpeo tu puerta, y te abrazo, me abrazo a tus piernas. Así, como un amante que te extrañó. Como un amante que viene a revolcarse en tus placeres nocturnos.
No sé si es engañar. La escritura es una sola, la escritora somos varias. Inescindibles, pero varias. Somos unas cuantas cacatuas, revoloteando en un solo cuerpo. ¿Psico-Patología? Quizás. Quién sabe. Sé que soy hija, sé que soy mujer, sé que soy niña, soy amante, soy amada, soy amadora, soy amor. Pero hay tantas otras que están revoloteando sin saber qué son. Y lo queremos descubrir. Ellas. Yo. Todas.
Sé que hay una lectora empedernida. Sé que hay una actriz melodrámatica. Hay una escritora amateur, que se pega sus escapadas de vez en cuando y se siente una artista de cuando en vez. Esta noche es de cuando en vez. Quiero sentirme profunda, quiero sentirme artista. Quiero ser La Maga, quiero ser Cortázar. Quiero que me hables ¡Ay qué ganas de fingir una conversación natural y superprofunda con vos! Qué ganas de creer en las casualidades, y en el amor. Qué ganas de creer en el amor. De creer tanto en el amor, tanto como para escribir sobre él.
Qué ganas de enamorarme hasta los huesos. De llorar hasta con rabia. De sufrir por amor, y sentirme dolida, dolida pero viva. Viva. VIVA.
Tengo ganas de escribir sobre cualquier cosa y que suene bien. Así como los escritores que me gusta leer. Qué ganas de que me escribas, qué ganas de hablarte. ¡Ay! Qué ganas de tocarte, de besarte, de amarte todos los días un poquito. Dejame, te suplico que me dejes amarte. No me ames si no querés. Pero dejate amar. Qué ganas de entenderte. Qué ganas de entenderme.
¿Podrás quererme? Cómo podrías quererme, si a veces ni yo misma me quiero. Cómo hago para quererme más que a vos. Más de lo que podría quererte. No digamos que te quiero todavía. Digamos que quiero quererte, que tengo ganas de encontrarme con vos; de encontrarnos. De encontrarme en vos, de encontrarte, ya sea o no en mí. Pero encontrarte. Dejemos que sea potencial. Dejemos que el tiempo me diga, como hacer para querernos. Y si podés quererme, mejor para vos. Mejor para mí. Mejor para los dos.

Hola, soy Yamila, y soy GORDA.

¿Cuándo empiezan a definirte tus dimensiones? ¿Cuándo comenzás a ser una gorda y dejás de ser una persona? Que alguien me diga cuándo tus kilos empiezan a ser tu característica más importante. 
¿A partir de qué momento la gente empieza a ver a una gorda y no a una mujer interesante? Esa es la cuestión. Eso no debería pasar. Porque gorda es una más de mis características, porque si me piden una descripción yo digo: soy morocha, tengo el pelo lacio, por los hombros, tengo ojos marrones, mido 1,53 mts, ah... Y soy gorda, ¿eso importa? ¿Tengo que advertirle a la gente que soy gorda si la conozco por internet, por ejemplo? Tengo que presentarme y decir: Soy Yamila, y soy gorda, por si te molesta, te cuento. Yo creo que no, que una persona es mucho más que su físico, su cara, la forma en qué se viste. Yo creo que soy mucho más que una gorda. 
"Si fueras flaca, serías tan linda"... O sea que no soy linda ahora, que además de gorda, tenés el tupé de decir que soy fea. ¿Quién te dio el título de dueño de la verdad y conocedor de la belleza? ¿Alguna vez charlaste con una mina hermosa, pero aburrida, chata, hueca, con pocas ideas? Decime si no fue un chasco, decime que no sentiste que querías irte de ahí y dejarla hablando sola. Diganme si cuando eso les pasa no se quieren matar. Acaso, ¿vale más una cara bonita que una charla amena, un cuerpo delgadito que una persona interesante, rica, llena de matices, que sabe cosas lindas de la vida, que lee? No digo que todas las flacas lindas sean así, digo que no tiene que ver eso con el cuerpo, también hay gordas aburridas, chatas, poco interesantes... Y eso es porque (oooh qué descubrimiento) NO TIENE ABSOLUTAMENTE NADA QUE VER el cuerpo, los kilos, el tamaño con lo que uno lleva dentro. 
¿Qué te hace más linda, tu cuerpo y tu cara o tu inteligencia, tu interés por los demás, por la vida, tu actitud, tus ganas de vivir, el brillito en los ojos, la pasión? Yo creo que ambas, pero que el cuerpo se va, y la belleza que queda, es la que nos pasamos la vida cultivando. Belleza que vamos a transmitir, una belleza que nos va a hacer trascender, más allá de los cánones impuestos. Yo creo que soy muy linda, gorda sí, pero linda, linda por dentro y por fuera y nadie tiene el derecho de decirme que no lo soy, o que soy diferente, o que no me merezco algo por ser gorda. Merezco amor, merezco respeto, merezco ropa linda, merezco todo lo que nos merecemos todos.
No es apología de la obesidad, porque ser gordo es una enfermedad. Porque por salud, deberíamos tener un peso saludable -valga la redundancia-. Pero ser gorda no es factor común de enfermedad, es un desencadenante, así como lo es la anorexia, la delgadez extrema.
No estoy orgullosa de ser gorda, quiero adelgazar, sí. Pero el primer paso es aceptarme tal cual soy, quererme, amarme, mimarme, para que ser gorda sea simplemente una circunstancia de la vida, que no afecte mi relación conmigo misma volviéndola tóxica. 
HOY YO ELIJO primero aceptarme, quererme y cuidarme, y como resultado de eso, voy a ser una mejor persona conmigo y voy a ser más sana. No al revés, no quererme cuando esté flaca, HAY QUE QUERERSE SIEMPRE, porque sino no sería aceptarme entera, completa.Quiero ser flaca como consecuencia de mi amor propio, no al revés; no quiero olvidar que soy gorda, quiero aceptarlo y que lo acepten.
Así que queridos, SOY GORDA, GET OVER IT. Mi procesión interior es eso INTERIOR, Y NADIE TIENE DERECHO A JUZGARLA.



Reina de los ciegos.

 En el reino de los ciegos, el tuerto es rey. 
Y yo... ¡Soy la reina de los ciegos!


Soy la reina para los ciegos. Soy esa mujer que deslumbra porque ellos, los ciegos, nunca han  visto otra mujer. 




Soy la que atrae a los mediocres, porque soy una mediocre, un poco menos mediocre.

 Soy la que atrae a los ciegos, porque soy "el tuerto". 
                    Soy la que al menos ha visto un haz de luz alguna vez, lo que los hace creer que vi el sol. Que soy experta en luces. Que estoy iluminada. 



Mi encanto se extiende, hasta donde alumbra el sol.




Amor del bueno

"Cómo sufro por amor" "no voy a enamorarme nunca más, el amor es una mierda" "el amor siempre lastima"
Interminable es la lista de insultos para el amor.
El amor, el sentimiento más noble, más lindo, más puro, más cálido. 
El amor que es el motor del mundo. 
El amor que es eso que hace que cada cosa que hagas, tenga sentido. El amor, la pasión, las ganas.
Sentimos amor, y así vemos los colores del mundo. 
El amor no lastima, el amor no te tiene que hacer sufrir, si es amor de verdad, te llena, te hace feliz.
El amor, hace que te valores, te quieras, te sepas descubrir. El amor no confunde.
El amor te hace grande, el amor te hace fuerte.
El amor mueve la vida. 
Amar lo que hacés, te da felicidad.
Amar no es pagar un precio, amar no es hacer esfuerzos. 
El amor no pide, el amor entrega sin más, sin siquiera pensar que entrega.
Si te hace sufrir, no es amor.
Si lloras, y no es de felicidad, no es amor. Amor del bueno.
Respetarse, es lo primero, porque la caridad bien entendida empieza por casa y no se puede dar lo que no se tiene. Todo empieza por uno, el día que logremos hacerlo, vamos a encontrar amor, amor del bueno.

Sabor a libertad

"La verdad nos hará libres" dijeron por ahí... Y sí, la verdad te libera y la libertad... QUÉ BIEN SABE LA LIBERTAD.
Ser libre es más que ser autónomo, es más que salir cuando querés, es más que hacer sin que te digan. Libertad es no ser esclavo de nada, ni de nosotros mismos. No ser esclavo ni de la comida, ni de la imagen, ni de lo que piensan los demás, ni de las dietas.
La libertad, va por dentro, nadie nos libera, nos liberamos nosotros mismos. La libertad da nos alivia, nos saca un peso de encima, nos da nueva vida, nos renueva. Nos ilumina la cara.
Sentirse libre, va más allá de la libertad del cuerpo. Sentirse libre es no dejarse doblegar. Es que nuestra mente esté libre, libre de todo.
Hoy, me siento libre en un aspecto. Cuando uno siente alivio, cuando uno no extraña, cuando uno pudo, por fin pudo decir que no... SE SIENTE LIBERTAD. Me sentí liviana, me sentí volátil, pero en el sentido más hermoso del mundo, casi mejor que un primer beso. Me sentí feliz, iluminada... Libre, libre, libre! Sentí que quería reírme a carcajadas, a sonoras carcajadas... Sentí que quería agradecerle al universo, a Dios, a lo que fuera que por fin dejaba de tener miedo.
Quizás lo dije en otra entrada, el miedo te ata, el miedo no te deja ser feliz. Bueno, la libertad, es la antítesis del miedo. El miedo ata, la libertad es vencer el miedo.
Me liberé, pero no de vos, no lo importante acá soy yo... No me liberé de vos, porque vos no me atabas... Me ataba yo, con mi inseguridad, con mi miedo a decirte que no, con mi lástima y no, no por vos, sino por mí. Dejé de tenerme lástima, me vi, me vi de verdad, me miré, me observé y por fin vi que merezco algo mejor, y que no sos vos, soy yo... Que no es nadie, que soy YO la que tiene que bregar por mí misma.
Porque te culpé, porque siempre busco chivos expiatorios. Busco gente de quien enamorarme, busco gente a quien culpar de mis inseguridades, busco siempre algo para escapar de mis responsabilidades, busco excusas, busco y busco cosas para evitar la realidad.
No, no te odio. Deseo que aprendas, que crezcas, que te enamores, que te cases, que te respetes y que respetes. Te deseo todo lo lindo, pero lejos de mí, porque de mis cosas lindas, a partir de ahora me ocupo YO.

FUERA DE MI VIDA

¿Cómo se puede ser feliz con miedo? Con miedo a que nos vean, con vergüenza, con cargo de conciencia. No se puede ser feliz, no. No se puede construir la felicidad sobre la desconfianza, sobre las mentiras, sobre el engaño.
No todo lo que brilla es oro, me contaron, y doy fe. No todo lo que parece felicidad, es felicidad.
Las migajas que tengo de felicidad, en esos pequeños momentos falsos, en esos 15 minutos de papel, no son felicidad.
NO PUEDO construir mi felicidad a costas de la felicidad de otra persona. Tanto ella como yo, sufrimos las mentiras. ME CANSÉ de echarte de mi vida, y no querés desaparecer, pero lo tengo decidido, voy a verte, por última vez, DE VERDAD POR ÚLTIMA VEZ y tengo el speech perfecto para que no puedas ni hablar. No importa que no me escuches, esta vez no vas a poder volver a callarme con un beso de esos asquerosos que me dabas. ESTA VEZ NO. Esta vez voy a ser firme, esta vez voy a pensar con la cabeza y con la memoria. Esta vez voy a recordar por qué TE QUIERO FUERA DE MI VIDA.
Te quiero fuera de mi vida porque YO NO SOY UNA OPCIÓN, por eso no te hago elegir. Porque no soy una opción. Porque no es "ella o yo"... Es ella, quedate con ella, porque yo no soy una opción. Y si no la querés APRENDÉ A ESTAR SOLO. Aprendé que las mujeres no somos objetos de colección, aprendé que los sentimientos no son cualquier cosa, los vínculos se plantan, se cuidan, se abonan, se miman para que crezcan fuertes y SANOS. Vos y yo tenemos una relación enfermiza y por eso te quiero fuera de mi vida. Porque no soy egoísta, pero NECESITO mi paz interior. Y para tener PAZ te necesito fuera de mi vida de una vez.

Por eso, porque te engañás, me engañás, la engañás digo BASTA. Hasta acá, TANTAS VECES TANTAS te quise dejar, TANTAS y tantas veces me perseguiste, tantas veces me ENFERMASTE EL ALMA. Yo ya no quiero más esto, esta es mi segunda despedida... Y esta vez DIOS SABE QUE ESTOY DECIDIDA A SACARTE DE MI VIDA. Porque no quiero enfermarme más. Por eso... UNA VEZ MÁS: Morite y no me avises. No me interesa ni siquiera ir a tu velorio

Vientos de cambio

A veces, cuando menos nos imaginamos, las cosas a las que nos aferramos, se van. Así como llegaron, se van, se esfuman, desaparecen sin dejar rastro. A veces, ya habían desaparecido antes, pero en nuestro afán de que las cosas se mantengan tal y como están, rodeados del miedo que nos dan los cambios, no queremos ver que todo termina.
A veces, me siento tan sola, que empiezo a recordar cosas de mi pasado, cosas que ya fueron superadas, y me confundo, pienso que quizás no olvidé, que quizás algo me quedó pendiente. A veces, de tanto en tanto, me creo una realidad paralela. Me invento una utopía en la que las cosas no cambian, en la que las personas que se fueron de mi vida, se mantienen, intactas, por siempre. Una fantasía en la que esas personas, me siguen queriendo como hace tiempo atrás, en las que yo las quiero como hace tiempo atrás.

Todos cambiamos. Nada se mantiene siempre tal y como nació. Los cambios son importantes. Son necesarios, los cambios nos hacen madurar. Los cambios asustan, y el miedo nos hace valientes.
De tanto en tanto, me niego a los cambios de manera rotunda... Rompo cosas, grito, lloro, me niego me niego y me niego. No entro en razón. Pero, cuando las aguas bajan, cuando mi cabeza se tranquiliza, es ahí cuando pienso en frío y me doy cuenta, que por mucho que duela, LA VIDA TIENE QUE CAMBIAR.
Los amigos tienen que irse, amigos nuevos tienen que llegar. Las personas tienen que morirse, tienen que nacer. Las cosas tienen que terminar, para que nuevas cosas empiecen. Es necesario.
Aunque los cambios asusten, hay que pensar qué pasaría si algunas cosas no cambiaran nunca. Por ejemplo, si algo que nos hace mal, estuviera todo el tiempo en nuestra vida, porque no nos animamos a dejarlo ir. HAY QUE DEJAR IR. No hay otra posibilidad.
Por eso, hoy empiezo a aceptar cambios, a dejar ir gente, a dejar entrar gente. A saber que no todo lo nuevo es malo (que las novias de mis amigos no son mis enemigas, por ejemplo, ejem). No todo tiene por qué ser malo. Y si lo es, bueno, bienvenido TODO porque todo nos hace crecer y todo pasa por algo. Nada en esta vida pasa por pasar. Siempre trae encadenado algo que nos cambia un poco la vida.